Y llega agosto…
Después de un año intenso de trabajo, será un mes para retirarme de la sala de consulta hacia un descanso, formación y para terminar de escribir el libro sobre el que llevo trabajando 4 años «Abandono y otras atrocidades – Trauma, neurociencia, sociedad y Gestalt» que espero vea la luz en los últimos meses del año.
Será un tiempo de reflexión sobre la forma que está tomando mi trabajo como terapeuta y de encontrar formatos para estructurar el año que viene a partir de septiembre/octubre.
Y por llegar de nuevo a este momento de descanso, decido este año agradecer a tod@s los que habéis entregado vuestra verdad, honestidad y un montón de experiencias y emociones, para ir dando espacio al surgimiento de la autenticidad que tanto desea poder sentir la luz, mostrarse y desvelar como percibe la vida.
Aunque suene repetitivo o cliché, es también una realidad que al ver vuestra valentía para enseñar el todo que os conforma, yo aprendo a dejar que el todo en mi pueda dejarse ver. Sin duda crezco al compartir con vosotros y a confiar que este espacio de vida en este plano terrenal, sin duda merece que apretemos los dientes para agarrarlo y no dejar escapar toda la inmensidad de la que está hecho.
A mis clientes
y a los compañeros de profesión, de formación, terapeutas y formadores, compañeros de MAI – Movimiento de Asistencia Integral, de Scabelum, de CC, a Pañña, a mis queridos Ramiro y Rosa que me han acompañado en la presentación de mi tesina y que me abren la puerta para iniciar mi recorrido de formador dentro de la formación de Terapia Gestalt. Y obviamente a mi linda compañera Reme con la que compartí lo mejor y lo peor de un año que nos ha mostrado nuevas puertas y caminos de valentía, a mis sobrinos Gonçalo y Samuel por todo lo que aportan a mi vida, por no hacerme olvidar de que con un gran corazón es posible avanzar para crear una buena vida. Y a mi familia de origen y a la que entré, por seguir sintiendo su cariño y presencia.
A todos vosotros, la mejor forma de expresar lo que siento al escribir estas frases, para que os llegue un aroma más acertado del sentimiento y que sobrepase los límites de la semántica, comparto un vídeo que tanto me sigue gustando. Desde su creación en 2009 me sigue pareciendo bello este trabajo de Vincent Moon.
Espero que la ternura, la intimidad y la presencia continua sin cortes dando visibilidad a cada rincón del encuentro que tienen estos grupos de música en una casa acogedora de Copenhague, os llegue en forma de abrazo. Me imagino como sería todos estar en esa casa compartiendo belleza.
Nos espera un gran verano. Os deseo lo mejor.